La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ajustó su estimación del PIB de México a 1.9% y la inflación a 6.7%.
Al mismo tiempo, incrementó su proyección sobre el comportamiento de los precios al consumidor de 2.3 a 1.9%.
En el caso de la inflación, según El Economista, la OCDE modificó al alza su expectativa de 5.4 a 6.7% al cierre del año.
Esta proyección es consistente con el consenso del mercado y varios organismos internacionales sobre que los precios se mantendrán por encima del rango del Banco de México (Banxico) por mayor tiempo a lo planteado.
Asimismo, la OCDE reporta en su informe que el consumo interno será clave del crecimiento para México. Uno de los grandes motores para ello será el sector turismo, uno de los grandes perdedores en la pandemia.
En declaraciones, la OCDE mencionó como factores de embate
La turbulencia geopolítica, producto de la guerra en Ucrania, ha generado una nueva fuente de incertidumbre para la economía mexicana. Si bien los lazos comerciales y financieros con los países en conflicto son débiles, las exportaciones mexicanas se verán afectadas indirectamente, principalmente a través de la economía estadounidense”,
consignó la organización.
Por otro lado, el organismo alertó sobre la inflación, consistente con otros organismos.
Aunque la perspectiva es que baje ante el alza de tasas de interés, señala que aún hay incertidumbre.
“La inflación puede ser más alta por más tiempo, erosionando el poder adquisitivo, en particular de los hogares más vulnerables, por lo que requeriría un mayor ajuste de la política monetaria”, apuntó.
En este tenor, resaltó que los estímulos fiscales, para contener las alzas en los precios de las gasolinas deberán ser temporales, y enfocarse a los hogares y empresas más afectadas.
Posible impulso del Gasto social e inversión
De acuerdo a la OCDE, son dos los factores que podrían impulsar el crecimiento en México.
Se trata del gasto social, así como el de inversión, lo cual traería beneficios también para la población.
“La recuperación en curso y las perspectivas de crecimiento a mediano plazo podrían fortalecerse mediante el aumento de la inversión pública, sobre la base de un análisis de costo-beneficio, y el gasto específico en programas sociales”, recomienda la OCDE.
Sin embargo, los datos al mes de abril en cuanto a la inversión física enseñan que el gobierno ejerció recursos por 222,610 millones. Esto corresponde a una contracción anual de 0.6%.
En tanto, se observa que el gasto en desarrollo social fue de 1.07 billones de pesos en el mismo periodo, incrementándose 1.5% vs año anterior.
Al interior, el rubro con mayores recursos fue el de protección social –donde se contemplan los programas prioritarios del gobierno, como la Pensión del Bienestar– con 528,376 millones de pesos, 14.1% más en comparación anual.
Mejoras en la regulación comercial
Por otro lado, la OCDE también llamó a mejorar las regulaciones comerciales a nivel subnacional.
Esto consiste en reducir las cargas administrativas y los costos monetarios para iniciar y formalizar empresas.
El objetivo, señala, es aumentar la inversión en el país e impulsar la creación de nuevos puestos de trabajo.
Llamó a asegurar que existan autoridades y reguladores de competencia independientes y con suficiente presupuesto, para impulsar la competencia y la productividad.