La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) ha confirmado que el año 2023 se ha convertido en el más caluroso registrado desde 1880, año en que comenzaron los registros globales de temperatura. Este anuncio llega con preocupaciones adicionales sobre eventos climáticos extremos y pone de manifiesto la urgencia de abordar la crisis climática.
Récords de calor y condiciones meteorológicas extremas, informa la NASA
Según un análisis detallado realizado por la NASA, las temperaturas globales promedio en 2023 estuvieron aproximadamente 1.2 grados Celsius por encima del promedio del periodo de referencia de la agencia (1951-1980). Este récord no solo confirma la tendencia de calentamiento global, sino que también coincide con un año marcado por condiciones meteorológicas extremas en todo el mundo.
Desde olas de calor abrasadoras en América del Sur, Japón, Europa y Estados Unidos hasta eventos climáticos destructivos como incendios forestales masivos y lluvias intensas en varias regiones, 2023 ha sido testigo de una serie de fenómenos extremos relacionados con el cambio climático.
6 meses de récords continuos
El informe de la NASA revela que, desde junio hasta diciembre, se establecieron récords mensuales de temperatura cada mes. Julio, en particular, fue identificado como el mes más caluroso jamás registrado. Este patrón continuo de temperaturas excepcionales destaca la magnitud del desafío climático que enfrenta el planeta.
Solo en Estados Unidos, se registraron 25 catástrofes climáticas que causaron daños superiores a mil millones de dólares cada una. Desde la perspectiva de la NASA, estos eventos extremos están intrínsecamente ligados a la crisis climática, y la relación entre fenómenos meteorológicos destructivos y el cambio climático es cada vez más evidente.
Desigualdades y perspectivas para el futuro
La científica y meteoróloga de la NASA, Marangelly Fuentes, enfatizó que el aumento de las temperaturas no tomó por sorpresa a la comunidad científica. Sin embargo, expresó su preocupación sobre la evolución futura de desastres naturales y cómo estos pueden volverse aún más destructivos en ausencia de medidas significativas.
Fuentes también señaló que mientras las concentraciones de gases de efecto invernadero sigan aumentando, es probable que las temperaturas globales también sigan esa tendencia al alza. Aunque hay esperanzas depositadas en acuerdos internacionales, como el alcanzado en la COP28 en Dubái, las consecuencias significativas pueden tardar años en manifestarse.
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