El presidente estadounidense, Donald Trump, declaró este lunes “inocente” al nuevo magistrado de la Suprema Corte Brett Kavanaugh, y ofreció disculpas a su familia por el “dolor y sufrimiento” que les causó el proceso de confirmación senatorial.
Durante la ceremonia formal de juramentación en la Casa Blanca, Trump acusó a los demócratas de lanzar una “campaña de destrucción personal” contra Kavanaugh, y sugirió que las acusaciones en su contra por ataque sexual forman una serie de “mentiras y engaños”.
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“Quiero ofrecer disculpas por el dolor y sufrimiento que han sido forzados obligados a soportar. Un hombre o mujer debe presumirse inocente a menos que se pruebe su culpabilidad. Usted, señor, bajo un escrutinio histórico fue declarado inocente”, señaló Trump en medio de aplausos.
Kavanaugh, de 53 años, fue confirmado el sábado por el más estrecho margen de voto para un magistrado de la Suprema Corte desde el siglo XIX, y aunque fue juramentado el fin de semana oficialmente, Trump dispuso una nueva ceremonia en la Casa Blanca.
Al igual que en la ceremonia privada en la corte, el juez retirado Anthony Kennedy presidió la ceremonia y tomó el juramento a Kavanaugh, rodeado por su esposa y sus dos hijas.
A la ceremonia asistieron todos los miembros de la Suprema Corte: los conservadores John Roberts, Clarence Thomas, Samuel Alito y Neil Gorsuch, y los liberales Sonia Sotomayor, Elena Kagan, Stephen Bayer y Ruth Bader Ginsburg.
En contraste con el discurso presidencial, Kavanaugh sostuvo que el “contencioso y emocional” proceso de confirmación quedó atrás, y sostuvo que no lo ve “con amargura”.
“Aunque el proceso me puso a prueba, no me cambió… un juez debe ser un umpire… debe ser independiente, interpretar la ley, no hacer la ley”, dijo desde el templete, en aparente respuesta a los críticos que creen que tendrá una actitud partidista desde el máximo tribunal.
“No fui electo para servir a un partido sino a una nación, dijo Kavanaugh, quien prometió buscar la “estabilidad y la unidad”, así como ser “un gran magistrado para todos los estadounidenses y todo Estados Unidos”.
Con esta designación, la Suprema Corte quedó constituida por cinco magistrados conservadores y cuatro liberales, una inclinación que podría ser decisiva en casos pendientes sobre migración, aborto o acción afirmativa, según expertos.
Kavanaugh sustituye al magistrado Anthony Kennedy, quien fue designado por el presidente Ronald Reagan en 1987, pero quien se convirtió en el centro político del máximo tribunal: un voto “columpio” que en ocasiones coincidía con los republicanos y en otras con los demócratas.
Con Kavanaugh, la corte queda integrada por cinco magistrados designados por presidentes republicanos: John Roberts; Clarence Thomas, el único afroamericano; Samuel Alito, Neil Gorsuch y Kavanaugh, estos dos últimos nominados por Trump.
Los otros cuatro fueron designados por presidentes demócratas: Sonia Sotomayor, la única latina; y Elena Kagan, por Barack Obama, así como Stephen Bayer y Ruth Bader Ginsburg, ambos nominados por William Clinton.
Aunque la edad promedio del tribunal será ahora de 65.7 años, Kavanaugh será el tercero más joven del tribunal, con 53 años. Sólo Kagan y Gorsuch son más jóvenes, con 50 y 51 años respectivamente. Los tres podrían permanecer en el tribunal al menos otras tres décadas.
Los magistrados liberales tienen las probabilidades de jubilarse, aunque el mandato es vitalicio, pues Ginsburg tiene 85 años y Breyer 80.
Organizaciones liberales temen que si alguno de los magistrados más veteranos deciden retirarse durante la presidencia de Trump, la inclinación a la derecha del tribunal podría ser más marcada. Fuente: MVS Noticias