El software espía Pegasus, que se puede utilizar para acceder de forma remota a los teléfonos, ha sido un protagonista en el sexenio.
De acuerdo a Milenio, Pegasus sólo se vende a gobiernos para perseguir a terroristas y criminales. Sin embargo, se ha detectado desde 2017 su uso para atacar a defensores de derechos humanos, periodistas, activistas, políticos de oposición y ciudadanos.
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Según una investigación de la Red por los Derechos Digitales (R3D), Aristegui Noticias, Proceso y Animal Político, se determinó que hubo espionaje con Pegasus en al menos 3 teléfonos de 3 periodistas y personas defensoras de derechos humanos entre 2019 y 2021.
El 3 de agosto de 2021, el presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que “no se espía a nadie”. Aún así, reconoció que el Ejército sí tenía un servicio “para llevar a cabo labores de inteligencia”.
Por otro lado, la investigación Pegasus Project que determinó que en México fueron ingresados más de 15 mil objetivos al sistema de NSO Group.
Órdenes de AMLO
El primer mandatario ordenó transparentar los contratos, pero ninguna dependencia del gabinete llevó a cabo lade seguridad cumplió la orden de presentar los documentos.
Ahora, investigaciones apuntan a que la Secretaría de la Defensa Nacional tiene contratos con la red de empresas que vendió el programa de NSO Group en México. A pesar de habérseles solicitado repetidamente la información, ha ocultado dicha situación.
Entre los correos filtrados por el grupo Hacktivistas Guacamaya, se halló uno de la Dirección General de Transmisiones de la Sedena.
En dicho correo, se habla de un “sistema de monitoreo remoto de información” con la empresa Comercializadora Antsua SA de CV.
Comercializadora Antsua contaba con cartas autorizándole la venta de Pegasus a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) entre 2018 y 2019.
Dicha empresa forma parte de la red del empresario israelí Uri Emmanuel Ansbacher Bendrama en México para vender equipo de espionaje y otros bienes al gobierno.
En el pasado, Pegasus operaba enviando mensajes de texto SMS que al darle clic el usuario, infectaba el equipo.
Actualmente, el sistema es tan sofisticado que no requiere la participación del usuario.