La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, ha dejado claro que el país no financiará la construcción del muro fronterizo impulsado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En una rueda de prensa en Palacio Nacional, Sheinbaum reiteró que no existe ningún acuerdo con el gobierno estadounidense respecto a esta obra y rechazó de manera tajante que México asuma costos para su edificación.
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Sin acuerdo sobre el muro fronterizo
Durante su conferencia matutina, la mandataria mexicana respondió a las preguntas de los periodistas y afirmó: “No, claro que no. Es una decisión con la que no estamos de acuerdo”. Este rechazo viene tras los recientes anuncios de la administración de Trump, que ha vuelto a poner en marcha la construcción de más de 120 kilómetros del muro en la frontera entre México y Estados Unidos. El gobierno estadounidense ha insistido en que México debe cubrir los gastos de esta infraestructura, una propuesta que Sheinbaum calificó de inaceptable.
La declaración de la presidenta marca una clara postura contra cualquier negociación que implique el uso de recursos mexicanos para financiar la construcción del muro. De acuerdo con la mandataria, estas iniciativas no reflejan los intereses de México, sino que van en contra de su enfoque de cooperación internacional y respeto por la soberanía.
Fortalecer la cooperación, no levantar muros
Sheinbaum aprovechó la ocasión para subrayar su creencia en un modelo de integración comercial y cooperación entre México y Estados Unidos, en lugar de optar por la construcción de barreras físicas. En este sentido, mencionó ejemplos de proyectos de colaboración que refuerzan los lazos entre ambos países, como el reciente puente ferroviario inaugurado en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Este nuevo puente, que conecta la ciudad mexicana con Texas, simboliza para la presidenta una vía para fortalecer el comercio entre las dos naciones. “Este nuevo puente de Nuevo Laredo para ferrocarril lleva mercancía desde el centro de México hasta Canadá y es un buen símbolo. Hay que construir puentes y no muros”, señaló Sheinbaum, resaltando la importancia de mejorar la infraestructura que permite el intercambio comercial, en lugar de erigir barreras que dificulten la comunicación y el desarrollo conjunto.
Reacciones a la reactivación del muro
El anuncio de la reanudación de la construcción del muro fronterizo ha generado una variedad de reacciones tanto en Estados Unidos como en México. En territorio estadounidense, el muro fue una de las promesas centrales de la campaña presidencial de Donald Trump en 2016, y el tema sigue siendo un pilar fundamental en su discurso migratorio. Trump ha insistido en que el refuerzo de la frontera es necesario para controlar el flujo migratorio desde América Latina hacia Estados Unidos.
Por otro lado, en México, el rechazo al muro es un tema recurrente desde el inicio de la administración de Andrés Manuel López Obrador, con el gobierno mexicano manteniendo una postura firme en defensa de la soberanía nacional. Además de Sheinbaum, otros líderes políticos mexicanos también han rechazado abiertamente la idea de financiar una barrera física en la frontera, argumentando que existen otros mecanismos más efectivos y humanos para abordar la migración.
Cooperación vs. confrontación
Sheinbaum ha sido una defensora del respeto mutuo entre México y Estados Unidos, promoviendo una agenda de cooperación que involucra el fortalecimiento de los lazos comerciales, culturales y de seguridad. En contraste, la propuesta de Trump refleja una postura más confrontativa y centrada en la seguridad, que se ha traducido en el insistente llamado a la construcción del muro como una solución a los desafíos migratorios.
Si bien la reactivación del proyecto del muro no es una sorpresa dado el historial de Trump en cuanto a políticas migratorias, la postura de Sheinbaum refleja una clara diferencia en la visión de gobernanza entre los dos países. Mientras Estados Unidos continúa con la implementación de medidas de control fronterizo, México se enfoca en la integración y el desarrollo conjunto, buscando soluciones basadas en la cooperación y no en la división.
Fuentes: López Dóriga
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