El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que su discurso de investidura del 20 de enero, así como otros actos relacionados con su toma de posesión, se llevarán a cabo dentro del Capitolio debido a las bajas temperaturas que se esperan para ese día. Esta decisión recuerda la tomada por el expresidente Ronald Reagan en 1985, quien también trasladó su ceremonia a este espacio por razones climáticas.
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Capitolio será el escenario principal de la ceremonia
Trump indicó en su cuenta de Truth Social que el evento se celebrará en la rotonda del Capitolio, ubicada debajo de la cúpula que conecta el Senado y la Cámara de Representantes. Esta ubicación es significativa tanto por su simbolismo como por su protección ante las inclemencias del tiempo. El último presidente en utilizar esta área para su juramento fue Reagan en su segundo mandato, también debido a un clima extremadamente frío.
El presidente electo explicó que la rotonda será el lugar desde donde pronunciará su discurso inaugural, un acto central de la ceremonia, en el que presentará su visión para el país. Además, aseguró que los líderes extranjeros, como el presidente de Argentina, Javier Milei, podrán asistir al discurso en persona dentro del Capitolio, en un entorno más resguardado del clima.
Condiciones meteorológicas severas en Washington
Se espera que el lunes 20 de enero las temperaturas en Washington sean extremadamente bajas, con una máxima de -5 grados Celsius y una mínima de -12 grados. La sensación térmica podría ser mucho más baja debido a los vientos del vórtice polar que afectarán al este de Estados Unidos en los días previos, proveniente de Canadá. Además, se anticipa una nevada el domingo por la noche, lo que podría cubrir las calles y plazas cercanas al Capitolio de nieve.
Ante estas condiciones, Trump instó a sus seguidores que planean asistir a los eventos al aire libre, como el desfile desde el Capitolio hasta la Casa Blanca, a que se abriguen adecuadamente para evitar cualquier tipo de accidente o malestar. “No quiero ver a nadie herido ni en peligro de ninguna manera”, afirmó en su publicación.
Alternativas para los seguidores de Trump
Aunque el discurso y otros actos principales de la ceremonia se realizarán en el Capitolio, los seguidores de Trump que deseen presenciar el evento en persona pero fuera del edificio podrán hacerlo en el estadio Capital One Arena, que se habilitará para la ocasión. En este lugar, el presidente electo planea estar presente durante la transmisión del evento y aprovechar la oportunidad para interactuar con sus seguidores.
El 19 de enero, el día antes de la toma de posesión, Trump también tiene previsto realizar un mitin titulado “Make America Great Again Victory” (Hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande: victoria) en un formato similar a sus anteriores rallies de campaña, en los que buscará reforzar su mensaje y conexión con la base de apoyo que lo eligió en las elecciones presidenciales.
Impacto del clima en las celebraciones
El ajuste del lugar de la investidura se da en un contexto de preocupaciones por las bajas temperaturas y las posibles dificultades logísticas para los asistentes. Tradicionalmente, las tomas de posesión de los presidentes de Estados Unidos incluyen ceremonias al aire libre, especialmente el discurso inaugural que se realiza en el frontis del Capitolio. Sin embargo, con las previsiones meteorológicas actuales, Trump optó por un enfoque más práctico y seguro, garantizando que los asistentes puedan participar en los eventos sin correr riesgos por el frío extremo.
La decisión de cambiar la ubicación del discurso también refleja la seriedad con la que se está manejando la seguridad y el bienestar de los presentes en la ceremonia. Con un clima tan adverso, las autoridades locales y los organizadores están tomando medidas para asegurar que los actos se lleven a cabo de manera ordenada y sin contratiempos, mientras se brindan alternativas para quienes deseen seguir el evento desde otros puntos cercanos.
Expectativa por la ceremonia de investidura
La toma de posesión de Donald Trump el 20 de enero será uno de los eventos más esperados del año en Estados Unidos, no solo por el cambio de administración, sino también por las circunstancias inusuales que acompañan este momento. La adaptación de la ceremonia debido a las condiciones meteorológicas extremas es un recordatorio de los retos imprevistos que pueden surgir en eventos de esta magnitud.
Fuentes: López Dóriga
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