En un giro dramático de los acontecimientos, el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, ha declarado que el país se encuentra en un estado de guerra después de enfrentamientos violentos con bandas del crimen organizado. Estas acciones llevaron al mandatario a declarar un conflicto armado interno, subrayando que Ecuador no cederá ante lo que su gobierno ha calificado como “terroristas”.
En su primera intervención pública desde el inicio de la crisis de inseguridad, Noboa expresó en una entrevista en Radio Canela que están enfrentando a terroristas y que Ecuador no negociará con ellos. Esta postura surge en respuesta a la fuga del líder de la banda criminal “Los Choneros”, Adolfo Macías ‘Fito’, quien escapó antes de ser trasladado a una cárcel de máxima seguridad.
El presidente ecuatoriano vincula las acciones violentas de las últimas jornadas como respuestas directas de grupos criminales ante las medidas tomadas por su administración para detener la escalada de inseguridad que ha colocado a Ecuador en la lista de los países más violentos del mundo.
Acciones decididas: objetivos militares y advertencias a jueces
Después de declarar a estas bandas como objetivos militares, el presidente Noboa aseguró que estas acciones provocadoras, como la toma de instalaciones de un canal de televisión, serán pensadas dos veces por estos grupos. Destacó que las bandas criminales buscan difundir imágenes para causar terror y socavar la resistencia del presidente, pero afirmó con determinación: “No van a doblegar al presidente”.
“Nuestra postura es clara: no negociaremos con terroristas”, reiteró Noboa. También confirmó que están trabajando en formas de rescatar a los guardias penitenciarios que han sido tomados como rehenes por miembros de estos grupos delincuenciales en varias prisiones del país.
Además, el presidente lanzó una advertencia seria a jueces y fiscales que emitan resoluciones favorables a los líderes o miembros de estas bandas criminales, indicando que también serán considerados y tratados como terroristas.
Imagen internacional de Ecuador y medidas urgentes
Noboa abordó la imagen internacional de Ecuador, señalando que no es momento de mostrar una fachada positiva. Reconoció que el país está en un estado de guerra y apeló a la comunidad internacional para resolver el problema. Invitó a aquellos dispuestos a ayudar y expresó que la solución rápida facilitará la llegada de inversionistas y turistas.
El presidente también propuso la deportación de alrededor de mil 500 presos colombianos que actualmente están en cárceles ecuatorianas. Esto no solo aliviaría la situación de hacinamiento en las prisiones, sino que también fue agradecido por países como Estados Unidos, China, Israel, Perú, Argentina y Colombia, que ofrecieron su ayuda.
Estado de excepción y jornada de terror en Ecuador
El lunes pasado, el presidente decretó un estado de excepción en todo el país debido a la violencia desencadenada por grupos de delincuencia organizada. Se produjeron disturbios en al menos seis cárceles y la fuga de reos considerados de alta peligrosidad, incluyendo ‘Fito’ y Fabricio Colón Pico.
Los acontecimientos se intensificaron con el incendio de vehículos, secuestros y amenazas a agentes de policía y penitenciarios, ataques con explosivos y la irrupción de encapuchados armados en el canal de televisión TC Televisión. La jornada dejó al menos ocho muertos, sumiendo a Ecuador en un pulso peligroso entre el crimen organizado y el Estado.
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