Interceptan bote con migrantes y un criminal
Las fuerzas de seguridad de Estados Unidos interceptaron una embarcación con cinco migrantes cerca de la costa de Aguadilla, en Puerto Rico. Entre los ocupantes se encontraba un ciudadano de la República Dominicana con antecedentes penales en territorio estadounidense.
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El operativo, realizado el 28 de febrero, fue ejecutado por la Guardia Costera tras recibir una alerta de la Policía de Puerto Rico. La embarcación, una panga de 6.1 metros de eslora, se encontraba a 5.56 kilómetros náuticos de la costa. A bordo viajaban dos ciudadanos rusos y tres dominicanos.

Migrante con antecedentes bajo custodia
Uno de los migrantes dominicanos, con antecedentes penales en Estados Unidos, fue detenido y enfrentará cargos por intento de reingreso ilegal al país. Fue trasladado a la Patrulla Fronteriza en Mayagüez, donde permanece bajo custodia a la espera de su proceso legal.
Las autoridades indicaron que los dos ciudadanos rusos, un hombre y una mujer, fueron entregados al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en San Juan para su investigación y posible deportación. Los otros dos dominicanos fueron repatriados a Punta Cana el 1 de marzo.

Refuerzo de vigilancia en el Caribe
El comandante Matthew Romano, de la Guardia Costera, señaló que este operativo es parte de los esfuerzos para frenar el ingreso irregular por mar. “Quienes intenten este viaje serán interceptados y repatriados”, afirmó. Advirtió también que los reincidentes podrían enfrentar procesos penales.
El patrullaje en aguas del Caribe se ha intensificado debido al incremento de intentos de cruce ilegal. Autoridades han identificado que muchas de estas embarcaciones provienen de República Dominicana, Venezuela y Haití, con destino a Puerto Rico. La migración irregular por mar ha aumentado en los últimos años, impulsada por el refuerzo de los controles en la frontera terrestre de EE.UU.

Rutas peligrosas y consecuencias
El aumento de intercepciones refleja la actividad de redes de tráfico de personas en la región. Viajar en embarcaciones precarias expone a los migrantes a riesgos de naufragios y explotación. Organizaciones de derechos humanos han advertido sobre las condiciones peligrosas que enfrentan quienes intentan cruzar el Caribe en busca de mejores oportunidades.
Mientras las autoridades continúan investigando el caso, el patrullaje en la región sigue en marcha para prevenir nuevos intentos de ingreso ilegal.
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