El Banco de México (Banxico) entregó a la Secretaría de Hacienda el mayor remanente de operación en la historia, equivalente a casi 1.5 puntos del Producto Interno Bruto (PIB).
El traspaso, que sumó 321,653 millones de pesos, resultó de la generación de utilidad de la operación del banco central, favorecida por la depreciación sin precedentes del peso frente al dólar, que en el 2016 fue de 19.5 por ciento.
Éste es el tercer año consecutivo en el que el Banxico reporta una operación positiva suficiente para reconstituir reservas y trasladar un remanente al gobierno conforme la ley y resulta también la más alta.
En un comunicado, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público expone que el remanente es correspondiente al ejercicio fiscal 2016 y, de acuerdo con la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, 70% deberá destinarse para el pago de deuda.
Menciona también que podrá destinarse a la reducción del monto de financiamiento necesario para cubrir el déficit presupuestario, o bien, una combinación de ambos conceptos. El restante (30%) deberá utilizarse para fortalecer el Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestarios o al incremento de activos que fortalezcan la posición financiera del gobierno federal.
“La recepción y uso del remanente de operación se verá reflejada en una mejora adicional en los Requerimientos Financieros del Sector Público y en el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) para el ejercicio fiscal 2017, con lo cual se acelera el proceso de consolidación fiscal”.
Aclaró que en los Informes Trimestrales sobre la Situación Económica y las Finanzas Públicas se dará cuenta de la aplicación específica de los recursos del remanente de operación, así como de la reducción que éste genere en el SHRFSP al cierre del año.
Al respecto, el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade, expresó que “Este remanente permite que nuestras finanzas públicas durante el 2017 se vean notablemente fortalecidas. Es, sin duda, un resultado positivo que acredita su fortaleza y un resultado que manda señales claras de confianza en el sentido de que México habrá de cumplir”, dijo en el marco de la entrega de recursos Crédito Joven Tasa Cero en Campeche.
Mencionó que las finanzas públicas mejoran y que uno de los principales objetivos es que la deuda como porcentaje del PIB se estabilice y empiece a disminuir.
“Vamos a lograr un superávit primario que, desde el 2008 no teníamos. Vale mencionar que aun antes de los remanentes, teníamos un calendario de finanzas públicas que nos llevaba a cumplir con esos dos objetivos”, estableció.
Agregó que, con este remanente de operación, el gobierno federal logrará incluso superar sus metas de déficit y superávit primario, el cual estimó en 0.4% del PIB.
Estado financiero
Al enterar a la opinión pública sobre la revisión a los resultados y auditoría del ejercicio fiscal 2016 del Banxico, las autoridades explicaron que la Junta de Gobierno registró un resultado neto de 535,311 millones de pesos, monto que decidieron utilizar de la siguiente forma:
Destinaron 207,081 millones de pesos, esto es, 37% del total, para incrementar la reserva de revaluación de activos, los ahorros del banco central. Otros 6,576 millones para incrementar la reserva de capital.
El resto, 321,653 millones, se trasladaron conforme a la Ley del Banxico, al gobierno federal.
Reducir vulnerabilidad
Ante la evidencia de que vendría un remanente de operación histórico en forma de ingresos no recurrentes para el gobierno federal, el Fondo Monetario Internacional (FMI) observó desde noviembre del 2016, la conveniencia de utilizar la totalidad para el pago de la deuda.
De acuerdo con Alfredo Coutiño, director para América Latina en la consultoría Moody’s Analytics, el uso total de estos recursos como lo recomienda el FMI, podría favorecer a la reducción del déficit público, que cerró el año pasado en 2.5% del PIB.
Al reducirse así a 1% del Producto, el déficit —coincidió Guillermo Aboumrad, el director de Estrategia de Mercados en Finamex Casa de Bolsa— se fortalecería la confianza de los inversionistas acerca del manejo de las finanzas públicas.
Además de este impacto, el estratega consideró que se reduciría este factor de vulnerabilidad a choques externos, como la depreciación cambiaría, lo que sería un factor positivo en la evaluación de las calificadoras que tienen la nota de México en perspectiva Negativa.
No obstante, admitió que cuando el FMI hizo la recomendación de usar 100% del remanente trasladado al pago anticipado de la deuda, las autoridades respondieron que se trataba de una decisión que debía pasar por el Congreso.
Banxico genera ahorros
Aboumrad añadió que la decisión del Banxico de utilizar 37% de la utilidad generada en el 2016 para ahorrar en la reserva de revaluación de activos, evidencia que el banco central es cuidadoso.
“Quieren ser precavidos al incrementar el guardado que tiene el banco central para una revaluación de activos y si el año que entra tuvieran pérdidas podrían utilizar este colchón”.
Con él concordó el analista financiero Guillermo Barba, quien mencionó que no hay señales que permitan anticipar que en los próximos tres o cuatro años el banco central pueda presentar una afectación mayor en la hoja de balance del banco central, resultado de la apreciación cambiaria. Por ello, resulta positiva la medida precautoria asumida por la Junta de Gobierno.
Barba matizó que no hay mecanismos de ley que obliguen al gobierno a devolver al Banxico los recursos no utilizados para el fin que está dirigido el remanente. Fuente: El Economista