El alcalde de la ciudad ucraniana de Bajmut, Oleksii Reva, ha confirmado hoy que los enfrentamientos entre tropas rusas y ucranianas en la localidad han dejado un saldo desgarrador de víctimas civiles. Según las últimas cifras oficiales, 204 civiles, incluyendo cuatro menores, han perdido la vida en estos combates, mientras que 505 personas más han resultado heridas, entre ellas 17 niños.

Bajmut, una vez una ciudad bulliciosa y próspera, ahora se encuentra prácticamente deshabitada, con su población reducida a tan solo 500 personas. Antes del estallido de la guerra, la ciudad y sus alrededores albergaban a aproximadamente 80,000 habitantes. Sin embargo, semanas de constantes ataques aéreos y ofensivas terrestres han obligado a la mayoría de los residentes a desplazarse a diferentes partes de Ucrania en busca de refugio y seguridad.
¿Como comenzaron los enfrentamientos en Ucrania?
El conflicto en Bajmut comenzó a principios de agosto de 2022, cuando las Fuerzas Armadas de Rusia, respaldadas por los mercenarios del Grupo Wagner, lanzaron una ofensiva contra la ciudad. Desde entonces, esta ha sido considerada como una de las batallas más sangrientas de la guerra en Ucrania, que se inició a finales de febrero del año pasado.

El Kremlin ha visto a Bajmut, ubicada en la región de Donetsk, como un enclave estratégico para la logística y el abastecimiento del Ejército de Ucrania en el frente oriental. Esta importancia ha llevado a Moscú a emprender acciones para hacerse con el control de la localidad, a pesar de las notables bajas sufridas.
Después de semanas de enfrentamientos, desavenencias en el mando militar ruso y reclamaciones de ambos bandos por el control de la ciudad, las autoridades rusas confirmaron a mediados de mayo haber logrado conquistar Bajmut. A partir de este punto, se ha iniciado el proceso de repliegue de los mercenarios del Grupo Wagner.
La situación en Bajmut refleja el alto costo humano y la devastación causada por el conflicto en Ucrania. Las comunidades locales se enfrentan a la pérdida de seres queridos y a la destrucción de sus hogares, dejando cicatrices emocionales y físicas difíciles de sanar. La comunidad internacional sigue instando a todas las partes a buscar una solución pacífica y duradera a este conflicto, con el fin de evitar más sufrimiento para la población civil.
Fuentes: Aristegui Noticias
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