Shelley Duvall, reconocida por su papel icónico como Wendy Torrance en la película ‘El Resplandor’ (The Shining), falleció este jueves a los 75 años. La noticia fue confirmada por The Hollywood Reporter.
Duvall murió mientras dormía en su hogar en Blanco, Texas, debido a complicaciones derivadas de la diabetes, según informó su esposo, Dan Gilroy. “Mi querida, dulce y maravillosa compañera de vida y amiga nos dejó. Ha sufrido mucho últimamente, ahora es libre. Vuela lejos, hermosa Shelley”, expresó Gilroy con profunda tristeza.
La actriz comenzó su carrera en el cine en 1970, debutando en ‘Brewster McCloud’, dirigida por Robert Altman, quien se convirtió en su gran mentor. Su colaboración con Altman continuó en películas como ‘McCabe & Mrs. Miller’ y ‘Thieves Like Us’, culminando con su participación en ‘Nashville’ en 1975.
Shelley Duvall protagonizó siete películas dirigidas por Altman, destacando su papel en ‘3 Women’, que le valió el Premio a la Mejor Actriz en el Festival de Cine de Cannes y una nominación al BAFTA.
Sin embargo, su fama internacional llegó con ‘El Resplandor’ en 1980, donde interpretó a Wendy Torrance, la esposa de Jack Torrance, interpretado por Jack Nicholson. La película, dirigida por Stanley Kubrick y basada en la novela de Stephen King, se convirtió en un clásico del cine de terror.
En una de las escenas más memorables del cine, Wendy se refugia aterrorizada en un baño mientras su esposo, enloquecido, la persigue con un hacha. “Aquí está Jack”, exclama Nicholson, asomando su cabeza a través de una puerta destrozada, en un momento icónico que ha quedado grabado en la memoria colectiva.
Shelley Duvall vivirá por siempre en el legado que dejo
La actuación de Shelley Duvall en ‘El Resplandor’ no solo dejó una marca indeleble en la historia del cine, sino que también la consolidó como una actriz de gran talento y versatilidad. Su legado perdurará a través de sus numerosas y variadas interpretaciones.
Shelley Shelley Duvall será recordada no solo por su contribución al cine, sino también por su espíritu indomable y su capacidad para transmitir emociones profundas a través de la pantalla. Su partida deja un vacío en el mundo del cine, pero su trabajo seguirá siendo una fuente de inspiración para generaciones futuras.
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