El canciller alemán, Olaf Scholz declaró que los cambios políticos y económicos emprendidos por Alemania para superar los problemas internos a raíz del conflicto en Ucrania han sido más fáciles de lo que cree el presidente de EE.UU.
Nos independizamos del suministro de gas, carbón y petróleo de Rusia. Nadie esperaba hace un año que nuestra economía pudiera sobrevivir fácilmente a una situación en la que Rusia ya no suministra gas a Alemania y a muchas partes de Europa. Pero lo hicimos
Scholz se reunió el viernes con el presidente de EE.UU., Joe Biden, en Washington. Durante el encuentro, Biden habló sobre las enormes transformaciones emprendidas por Scholz el año pasado y de lo “difícil” que resultó para el país europeo.
Usted ha impulsado cambios históricos en su país, como el aumento de los gastos de defensa y el desvío de las fuentes de energía rusas. Sé que no ha sido fácil. Ha sido muy difícil para usted
El líder alemán indicó que el aumento de importaciones de gas natural licuado desde los puertos occidentales de Europa, la construcción de nuevos puertos en el norte de Alemania y la operación extendida de las plantas de carbón y centrales nucleares, es lo que permitió incrementar la generación eléctrica.
Mencionó que su Gobierno gastó un total de 300.000 millones de euros en estabilizar la economía y ayudar a la gente común ante la inflación y el aumento de los precios de energía.
Confirmó la meta del 2 % del PIB nacional acordada con la OTAN, además de remarcar que el presupuesto militar alemán es el mayor de la UE y que quiere que sea aún mayor.
Para garantizar el suministro de armas, equipos y municiones al Ejército se requiere que la industria lance la producción, señaló Scholz. Con este fin, se ha acordado un fondo de 200.000 millones de euros en el Parlamento para que se puedan tomar decisiones necesarias para el suministro a largo plazo
El canciller reiteró la determinación de Berlín de continuar apoyando a Kiev, tanto en el aspecto financiero como armamentista. En este sentido, recalcó que Alemania proporciona la mayor ayuda al país eslavo en la Europa continental, con un desembolso de recursos estimado en 14.000 millones de euros.
Debido a la crisis energética, Alemania dio luz verde al reinicio de operaciones en termoeléctricas alimentadas por carbón que estaban en desuso o debían cerrarse a pesar del plan de la Comisión Europea aprobado en mayo de 2021.
Alemania está quemando carbón para producir electricidad al ritmo más rápido de los últimos seis años.
Fuente: RT