La zona de construcción del Tren Maya se realiza sobre un terreno de cuevas, cenotes y ríos subterráneos.
20 de abril 2022.- La obra de construcción del Tren Maya entre las vías de Playa del Carmen y Tulum, se suspende provisionalmente porque no hay autorización en materia de impacto ambiental.
“Si bien la sociedad tiene interés en que se construyan vías de comunicación para el servicio público, lo cierto es que también le interesa que se haga conforme a las disposiciones legales que en materia ambiental prevé el derecho mexicano”, argumentó el juez.
Tras la solicitud de la Asociación Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano, el Juzgado Primero de Distrito de Yucatán, concedió la suspensión provisional a los buzos expertos de cavernas.
“Para el efecto de que se suspenda o paralice cualquier acto que tenga como finalidad la continuación de la construcción del tramo cinco, sector sur, del Proyecto Tren Maya, de modo que no se permita la ejecución de obras relacionadas con su construcción, infraestructura, remoción o destrucción de la biodiversidad del terreno o cualquier otra actividad que implique su ejecución material”
Se notificó a Fonatur, Sedatu y Sedena, instancias responsables del proyecto en este tramo.
Sin embargo, la suspensión no implica que se frenen los trámites administrativos relacionados con el proyecto como la obtención de permisos ambientales, la elaboración de presupuestos y proyectos, o cualquier acto administrativo que no tenga impacto o ejecución material en la zona.
“Estamos en una carrera contrarreloj con una locomotora bestial que va sin un conductor que sepa lo que está haciendo”, declaró un experto con más de 18 años de experiencia en cavernas acuáticas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, durante su conferencia matutina de este martes, aseguró que su Gobierno no ha sido notificado sobre la suspensión de la obra.
“Todavía no hay una notificación oficial. No sabemos de qué se trata, solo lo que ya es de dominio público, hay con propósitos políticos, no ambientalistas, una campaña en contra del Tren Maya financiada por organismos internacionales y por empresarios mexicanos”, expresó.
El Gobierno ha defendido que el Tren Maya supone un detonador de desarrollo económico que “resolverá el problema de falta de conectividad e infraestructura del transporte en el sureste del país”.
El mandatario ha referido que toda la tala que provoque la obra se verá compensada por un programa de reforestación de 200 mil hectáreas y la creación de tres parques naturales de 18 mil hectáreas.