Según datos de la Organización Mundial de Turismo (OMT), una de las principales motivaciones de los viajeros es la oportunidad de conocer la cultura y degustar la comida local en sus destinos. México, con su rica y diversa tradición culinaria, tiene un gran potencial para atraer a foodies y viajeros interesados en la gastronomía, pero aún puede apostar más por el turismo gastronómico.
Fernando Olivera Rocha, vicepresidente de turismo de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), destacó que la comida es una de las principales motivaciones para viajar, ya que muchas personas eligen destinos en función de la oferta gastronómica que ofrecen. Además, subrayó que México cuenta con numerosos restaurantes de renombre internacional que han sido reconocidos en listas como los “50 mejores restaurantes de Latinoamérica” o los “50 mejores restaurantes del mundo”.
Para aprovechar este potencial, México y destinos específicos como Quintana Roo pueden enfocarse en atraer a foodies dispuestos a pagar por experiencias culinarias únicas. Olivera Rocha resaltó la diversidad gastronómica de México y la accesibilidad de las opciones culinarias para diversos presupuestos y tipos de turistas. Desde restaurantes de alta cocina hasta puestos de comida tradicional, México puede ofrecer una amplia gama de experiencias gastronómicas.
El experto en turismo comparó la situación con países como España, que se ha convertido en un referente de la cultura culinaria, donde los viajeros saben que pueden disfrutar de experiencias culinarias de alta calidad, ya sea en restaurantes con estrellas Michelin o en establecimientos más informales. México podría seguir este modelo y promover la idea de que los viajeros pueden disfrutar de la comida local en cualquier lugar del país, desde tortas tradicionales hasta platillos elaborados por cocineras locales.
La OMT reconoce la gastronomía como un segmento importante del turismo, ya que la comida es una necesidad básica y una parte fundamental de la experiencia de viaje. Por lo tanto, México tiene la oportunidad de promover su rica tradición culinaria como un atractivo turístico en sí mismo, atrayendo a foodies y amantes de la gastronomía de todo el mundo.
En resumen, México tiene un gran potencial para atraer a viajeros interesados en la gastronomía y debe seguir promoviendo su diversidad culinaria para convertirse en un destino de turismo gastronómico de renombre internacional.
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