Un total de 25 congresistas demócratas pidieron al Presidente Donald Trump que abandone lo que calificaron como “una política de confrontación” con México y que refine la asistencia al vecino del sur para darle énfasis al combate a la corrupción.
Asimismo, los congresistas —encabezados por Norma Torres, Eliot Engel y Albio Sires— exhortaron al mandatario a aumentar sus esfuerzos para combatir el tráfico de armas hacia México y a colaborar para que las instituciones mexicanas puedan combatir la corrupción. “México es un socio importante para Estados Unidos y es uno de los principales aliados en el hemisferio occidental”, reza la misiva enviada a la Casa Blanca días después de que los secretarios de Estado, Rex Tillerson, y de Seguridad Nacional, John Kelly, se reunieran con sus homólogos en Ciudad de México.
Por la mañana, el Vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, subrayó hoy que México pagará el muro que el Presidente Donald Trump quiere construir en la frontera sur.
Pence se refirió a ese asunto en una entrevista con el programa “Good Morning America”, de la cadena ABC, en la que habló del discurso que Trump dio este martes ante el Congreso para definir las principales líneas de su programa político, que incluye el muro.
“Vamos a construir el muro. Vamos a aplicar las leyes de este país”, afirmó Pence.
Sin embargo, el Presidente no señaló en su alocución en el Capitolio que “México lo vaya a pagar”, le recordó el entrevistador al Vicepresidente.
“Bueno, lo hará”, remarcó Pence, tras indicar que “el Presidente expuso sus prioridades”.
En su discurso ante la sesión conjunta del Congreso, Trump aseguró que la construcción del muro en la frontera con México comenzará “pronto”, y será “un arma muy contra el crimen y las drogas”.
“Debemos restaurar la integridad y el imperio de la ley en nuestras fronteras. Por eso, pronto comenzaremos la construcción de un gran muro a lo largo de nuestra frontera sur. Se iniciará antes de lo programado y, una vez terminado, será un arma muy eficaz contra el crimen y las drogas”, afirmó el mandatario.
Las propuestas del nuevo Presidente para deportar a los 11 millones de inmigrantes que residen sin autorización en Estados Unidos, de imponer a México el costo de la construcción de un muro a lo largo de la frontera binacional y de renegociar el tratado comercial que también incluye a Canadá han complicado notablemente la relación entre ambos países.
El muro en la frontera fue una de las promesas estrella con las que llegó a la Casa Blanca Donald Trump, quien ha asegurado que el coste de la obra lo asumirá México, aunque el Congreso estadounidense adelante el dinero.
El Presidente mexicano Enrique Peña Nieto canceló una visita a la Casa Blanca prevista para el 31 de enero, días después de que Trump le dijera durante una conversación telefónica que podría mandar militares a enfrentar a los “bad hombres ahí” a menos que el Ejército de México hiciera más para controlarlos. La Casa Blanca dijo luego que los comentarios tuvieron un tono “a la ligera”.
México se niega tajantemente a asumir ese coste, lo que ha abierto una crisis diplomática entre los dos países vecinos.
El pasado 24 de febrero, el Gobierno de Estados Unidos pidió a las empresas interesadas que entreguen en marzo sus proyectos para el diseño y construcción del muro fronterizo con México a fin de que, en abril, comience la adjudicación de contratos.
El coste estimado del muro fronterizo ha ido creciendo progresivamente desde los alrededor de 8 mil millones de dólares que calculó inicialmente Trump, hasta los 21 mil 600 millones, según los últimos números del Departamento de Seguridad Nacional. (Fuente: Sin Embargo)