México ha registrado uno de los mayores impactos de migración laboral debido a que la pandemia amplió la posibilidad de trabajar a distancia. Es así que los llamados “Nómadas digitales” ven a México como una nueva oportunidad laboral.
“Los trabajadores nómadas han estado en el país desde hace mucho tiempo, pero la pandemia incentivó la llegada de personas de Estados Unidos y de Europa que venían buscando un espacio de trabajo más económico, con mejor clima, acceso a la naturaleza, cultura”, menciona Pedro Casas, uno de los autores del estudio.
El coronavirus también aumentó el teletrabajo, la combinación perfecta. “Millones de trabajadores y empleadores en el mundo corporativo comprendieron que el trabajo a distancia es posible y deseable para muchas industrias”. De esa manera, la crisis sanitaria generó “un nuevo mercado de trabajadores remotos”, señala el tercer reporte de la serie Inmigración en México: Más apertura, menos barreras.
Las personas trabajadoras identificadas como nómadas digitales “buscan lugares asequibles para habitar por periodos de entre tres y seis meses, para posteriormente mudarse de nuevo”, indica el estudio. Ese grupo representa “un nicho creciente de trabajadores independientes”, que el país no puede aprovechar debido a limitaciones legales, apunta MCV.
¿Qué tiene que ver la gran renuncia en EU con México?
Es difícil saber cuántas trabajadoras y trabajadores nómadas han llegado a México porque entran con visa de turista, explicó Pedro Casas, de la U.S-México Foundation. “Es imposible diferenciar” quiénes viajan para conocer el país y quiénes para trabajar un tiempo aquí.
Sin embargo, los investigadores encontraron que el gasto promedio de los y las turistas rebasó los niveles previos a la crisis sanitaria. En 2018, una persona que llegaba al país por vía aérea gastaba en promedio 925 dólares, pero en 2021 sus consumos llegaron a 1,110 dólares, un incremento de 20 por ciento.
Otra pista es la gran renuncia, un fenómeno que ha generado vacíos laborales en múltiples industrias en Estados Unidos. Durante la pandemia, más y más personas en ese país revaloraron su relación vida-trabajo. Las últimas cifras de la Oficina del Censo estadounidense reportan que 4.5 millones de trabajadores decidieron renunciar a su empleo.
¿Cómo aprovechar el “gran reajuste”?
Al parecer, esa situación está dando paso al gran reajuste. Es decir, la búsqueda de condiciones laborales distintas, como trabajar en lugares que les den los beneficios profesionales y personales adecuados para su estilo de vida. Esto abre la oportunidad de incentivar la atracción de talentos foráneos.
Pedro Casas señala que la llegada de nómadas digitales a México ya está sucediendo y cada vez más. El reporte de México ¿Cómo Vamos? cita los resultados de una encuesta realizada por la plataforma de hospedaje Airbnb a sus clientes que llegan a México, los cuales indican que el 60% tiene interés en trabajar en el país mientras viaja.
Sin embargo, el primer reto para aprovechar a estos grupos son los permisos de trabajo. MCV recomienda ampliar el marco jurídico para que las personas extranjeras puedan obtener un empleo.
Por lo que convendría también la creación de visados –o permisos laborales expeditos– para emprendedores y empresarios que busquen invertir en la economía mexicana, pues generan empleos.
Según el reporte, en la pandemia más de 40 países en el mundo hicieron adecuaciones migratorias, logrando atraer distintas fuentes de capital humano a su país.
Es necesario también “promocionar al país como un destino económico para los trabajadores de la era digital”, mediante campañas, recomienda el organismo.