Por cada credencial de elector no reclamada, el Instituto Nacional Electoral (INE) pierde en promedio 22 pesos de elaboración. La volatilidad de la población, atraída por migración laboral es la causa de ello.
Solamente el año pasado la Junta Local del INE en Quintana Roo reportó casi medio millón de pesos de pérdidas en micas electorales no recogidas por sus propietarios y de acuerdo al protocolo tienen que ser destruidas
Fueron casi 10 mil credenciales de elector tramitadas pero se quedaron reguardadas, afirmó la vocal ejecutiva del INE en Quintana Roo, Claudia Rodríguez Sánchez.
“El costo de cada credencial está estimado en un dólar y sabemos que está subiendo, que es de 20 pesos, pero además todos los costos indirectos del personal que tenemos en módulos, de los inmuebles arrendados para prestar la atención al ciudadano”, informó.
Con tales recursos podrían haberse adquirido una ambulancia o una patrulla equipada o bien insumos para la producción agrícola de la entidad, por citar ejemplos.
Por tanto, la vocal ejecutiva del INE exhortó a los ciudadanos que tramitaron sus credenciales de elector, a recogerles.
El pasado 17 de marzo se destruyeron mil 177 credenciales que durante años habían estado en bodega.
El representante del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Raúl Triay Sánchez, señaló que al ofrecer Quintana Roo diversas opciones de trabajo mucha gente migra y solicita la credencial de elector pero luego, por diversas circunstancias no le recoge.
“Pasa el tiempo y se va del estado y las micas quedan resguardas y luego son destruidas”, señaló. Herlindo Vázquez