Acoso sexual en las inmediaciones de escuelas
En 2024, Quintana Roo ha registrado al menos nueve casos de acoso sexual a jóvenes, especialmente en las cercanías de escuelas, generando una creciente alarma entre padres de familia y autoridades locales.
Contenido
Estos incidentes, que afectan en su mayoría a estudiantes de secundaria, ocurren principalmente durante el trayecto entre el hogar y las instituciones educativas.
La seguridad de los estudiantes se convierte en prioridad
Sergio Acosta Manzanero, vicepresidente de la Asociación Nacional de Padres de Familia (Anpaf), expresó su preocupación ante la situación, señalando que los agresores suelen ser personas ajenas a los centros educativos.
“Los acosos son perpetrados por individuos externos que rondan las salidas de las escuelas, lo que representa un riesgo constante para nuestros hijos”, indicó Acosta Manzanero.
También subrayó que algunos estudiantes han sido víctimas de robos, especialmente de teléfonos móviles, durante estos trayectos.
Estrategias para mejorar la seguridad
Los casos se concentran en la zona norte del estado, específicamente en los municipios de Benito Juárez y Solidaridad. En respuesta a estos preocupantes eventos, las asociaciones de padres de familia han establecido un canal de comunicación directo con el secretario de Seguridad Pública de Quintana Roo, Julio César Torres Gómez, con el fin de trabajar en soluciones efectivas.
En agosto, se llevaron a cabo reuniones en el Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad (C5) de Cancún, donde se discutieron estrategias para mejorar la seguridad en los horarios de entrada y salida de los estudiantes.
Una de las iniciativas destacadas ha sido la organización de grupos de vigilancia compuestos por padres de familia, quienes colaboran estrechamente con las autoridades para prevenir incidentes.
Vendedores ambulantes, la red de apoyo
Además, se ha involucrado a vendedores ambulantes que suelen estar cerca de las escuelas, ampliando la red de apoyo en la vigilancia.
También se han instalado cámaras de videovigilancia en algunos centros educativos que recibieron fondos del programa “La Escuela es Nuestra”.
Estas cámaras están conectadas a las asociaciones de padres y al personal administrativo, asegurando una vigilancia constante tanto en horario escolar como durante los períodos vacacionales.
“Estamos buscando que la vigilancia sea constante y efectiva, porque la seguridad de nuestros hijos es lo más importante”, concluyó Acosta Manzanero.
La colaboración entre autoridades, padres de familia y la comunidad educativa es fundamental para prevenir futuros casos de acoso y garantizar un entorno seguro para los estudiantes. Estos esfuerzos buscan proteger a los jóvenes no solo dentro de las escuelas, sino también en su recorrido diario hacia ellas.
Fuente: 24 hrs Quintana Roo
Sé el primero en comentar post