Chetumal, Q. Roo.- Al carecer de recursos para edificar un nuevo basurero, el Ayuntamiento de Othón P. Blanco depende del Gobierno del Estado y Poder Legislativo, en posible autorización de una partida de recursos adicional.
En tanto se realizan acciones de saneamiento del lugar para mantenerle en operación, reconoció el secretario general del Ayuntamiento de Othón P. Blanco, Alejandro Rivera Romero.
El ciclo de funcionamiento del Tiradero a Cielo Abierto de Chetumal feneció desde hace más de un lustro. A diario ingresan hasta 280 toneladas de residuos sólidos que no reciben el tratamiento adecuado para el manejo y disposición final.
Hay al menos 15 mil habitantes de zonas aledañas que resultaron afectados por la diseminación de residuos y fauna nociva.
El secretario general del Ayuntamiento de Othón P. Blanco expuso que se solicitó al Poder Ejecutivo y Congreso del Estado una partida de recursos para atender este tema.
Porque además de representar un problema latente de salud pública, existen un ordenamiento judicial que obliga a atenderle.
Rivera Romero indicó que se ha expuesto y justificado el proyecto de solicitud de recursos, pero aún se está a la espera de la respuesta de tales órganos.
“La capacidad está saturada, hacemos acciones de saneamiento para tener un lugar donde depositar los desechos sólidos… Sin embargo esperamos el pronunciamiento del Estado y Congreso Local, en la solicitud de recursos”, destacó.
Dio a conocer que la construcción de un nuevo tiradero a cielo abierto requiere de al menos 200 millones de pesos, que no se tendrán durante el próximo Ejercicio Fiscal 2020.
Solo se realizan trabajos de saneamiento del tiradero a cielo abierto para contar con el espacio para la acumulación de basura.