Reforma del ISSSTE cambia reglas para jubilaciones y salud
El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) busca fortalecer los derechos de los empleados públicos con una reforma estructural.
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La iniciativa, impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, fue enviada a la Cámara de Diputados para su análisis y eventual aprobación.
El proyecto se basa en el plan de 25 puntos presentado por Martí Batres Guadarrama, director del ISSSTE, con el objetivo de mejorar la atención médica, optimizar la seguridad social y fortalecer el financiamiento del instituto. Entre las medidas destacadas se encuentran:
- Homologación de salarios médicos con los del IMSS.
- Aumento de personal en clínicas y hospitales.
- Reducción de tiempos de espera en consultas y cirugías.
- Garantía de abasto de medicamentos y materiales de curación.
- Mejora de pensiones y revisión de aquellas que superen el límite legal.
Cambios en créditos de vivienda
Uno de los aspectos centrales de la reforma es el acceso a créditos hipotecarios a través del FOVISSSTE. Se propone flexibilizar los requisitos para obtener financiamiento, mejorar las tasas de interés y extender los plazos de pago.
Además, se busca condonar deudas a derechohabientes que han pagado más del doble por su vivienda y permitir la autoconstrucción en propiedades sociales. También se pretende que FOVISSSTE tenga la capacidad de construir y vender viviendas directamente.
Estas modificaciones están diseñadas para beneficiar principalmente a los empleados públicos de menores ingresos, garantizando su acceso a una vivienda digna y asequible.
Reacciones y preocupaciones del magisterio
La reforma ha generado reacciones en diversos sectores, principalmente entre el magisterio. Profesores de distintas entidades han organizado manifestaciones y paros en respuesta a ciertos cambios que consideran perjudiciales para sus derechos laborales.
Uno de los puntos más cuestionados es la nueva forma de cálculo de las cuotas sobre los seguros de salud. Actualmente, se basan en el sueldo básico, pero la reforma plantea que, si un trabajador percibe más de 30 mil pesos al mes, la aportación se calcule sobre el salario integrado, incluyendo prestaciones.
De acuerdo con estimaciones oficiales, este ajuste permitiría recaudar hasta 11 millones de pesos anuales, los cuales se destinarían a mejorar los servicios de salud del ISSSTE. Sin embargo, sindicatos y trabajadores han señalado que representa una carga adicional para los empleados del sector público.
Ante las protestas, la presidenta Claudia Sheinbaum aclaró que la medida solo aplicará a servidores públicos de confianza en los tres poderes del Estado. Afirmó que el gobierno absorberá la mayor parte del gasto necesario para la mejora del ISSSTE, bajo la premisa de que quienes tienen mayores ingresos contribuyan más.
Otro tema en debate es la reducción de los años de servicio necesarios para la jubilación. Aunque el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, considera que esta medida es legítima, reconoció que aún no se cuenta con los recursos suficientes para aplicarla en el corto plazo.
La discusión sobre la reforma del ISSSTE continúa en el Congreso, con la expectativa de que las modificaciones permitan mejorar los servicios médicos y sociales sin afectar los derechos laborales de los trabajadores del Estado.
Fuente: Ruptura360
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