Cancún, Q. Roo.- Un grupo de toreros y galleros de Benito Juárez se reunieron en la sede del Congreso estatal en Cancún para manifestar su inconformidad por la Ley de Bienestar y Protección Animal, en donde el diputado Eduardo Lorenzo Martínez Arcila, presidente de la Gran Comisión, los tranquilizó al asegurar que la legislación no contempla sanciones, por lo que “sería inoperante”.
Diputados locales se reunieron, por separado, con activistas y organizaciones a favor de que se mantenga la ley pro animal, así como con ganaderos y promotores de corridas de toros y pelea de gallos, quienes piden que sea derogada la polémica normativa.
El empresario de toros Jorge Ávila y el matador Amado Luna, director de la Escuela Taurina de Cancún, se manifestaron por las fiestas taurina y gallística porque “son nuestro modo de vida y son fuentes de empleo, además de temas muy discutidos por grupos (animalistas) que sin pleno conocimiento se pronuncian por prohibir las tradiciones y la cultura”.
Además, coincidieron en que “los toros de lidia y los gallos de pelea son criados para dar su vida en ruedos y palenques, y en ambos casos no son comestibles debido precisamente a la forma en que son crecidos (sic)”.
En tanto, Martínez Arcila les espetó en forma de pregunta que “cuál sería la sanción para alguien que organice una corrida de toros, ninguna porque no hay sanción. La autoridad no puede sancionar algo si la ley no le faculta, no puede aplicar una multa o lo que sea” y sumó:
“Además, el tema del reglamento no es algo que un ayuntamiento pueda hacer, a menos que en la ley ya esté contemplado, y tampoco lo está, no se contempló”, aclaró que un reglamento no puede estar por encima de la ley ni sustituirla.
“Yo, en el reglamento, no podría definir lo que es una corrida de toros porque eso lo debí haber hecho en la ley, y ésta establece los puntos generales y es un marco para cuando se haga el reglamento. Si se sale del marco, empieza a asumirse como la ley, y no puede estar por encima de la misma”, destacó.
El legislador aclaró que esa ley aún no está vigente porque no ha sido publicada, y en ese sentido, dijo que entiende que no le pueda gustar a algunos, pero si mañana se publica la gente pensará que “se le está viendo la cara” porque acudirán a denunciar que alguien la viola, pero no podrán hacer nada porque no se contemplaron sanciones.
Según, quienes gustan de la fiesta taurina y las peleas de gallos es violentado el artículo dos de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, además de no haber consultado a la población, principalmente la indígena, sobre la decisión.
El artículo dos constitucional reconoce a los pueblos indígenas como parte de la nación, asegura su bienestar, así como también su identidad, costumbres, lenguas, sus derechos normativos dentro de la comunidad, su patrimonio y garantiza impulsar su desarrollo en materia de educación e infraestructura, además de asegurar sus derechos.
Los inconformes señalaron que con la Ley de Bienestar Animal se está destruyendo la cultura de los pueblos indígenas con una ley arbitraria, y confiaron en dar marcha atrás a la legislación, a la que consideraron absurda.