El gobierno de Estados Unidos notificó este sábado al gobierno canadiense que, a partir del próximo martes, se aplicarán aranceles del 25% sobre las importaciones provenientes de Canadá. Esta medida afectará a una amplia gama de productos, con excepción del petróleo y gas, que tendrán un gravamen del 10%. La decisión fue confirmada por funcionarios de la administración del presidente Donald Trump a medios como AFP y The New York Times.
La medida ha sido recibida con inquietud por las autoridades canadienses, quienes se preparan para responder a este nuevo reto comercial. A pesar de la gravedad de la situación, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, aún no ha emitido una declaración formal, aunque se esperaba que su respuesta se diera en las horas siguientes a la notificación.
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Aranceles aplicados a casi todos los productos
La nueva política comercial de Trump tiene como objetivo aumentar los aranceles en productos importados desde Canadá. Según las fuentes, todos los productos estarán sujetos al arancel del 25%, con la excepción de los productos energéticos, como el petróleo y el gas, que se gravarán con un porcentaje más bajo del 10%.
Este cambio en la política comercial también afecta las relaciones entre Estados Unidos y otros países, ya que Trump ha reiterado sus planes de imponer aranceles a otras naciones, con un enfoque particular en México y China. Aunque el anuncio afectará principalmente a Canadá, se prevé que la medida tenga repercusiones en las relaciones comerciales en América del Norte.

Canadá se prepara para responder
El gobierno canadiense aún está evaluando la situación y su respuesta. El primer ministro Justin Trudeau había advertido previamente sobre la posibilidad de una “respuesta inmediata y determinada” ante los nuevos gravámenes. Además, enfatizó que cualquier respuesta canadiense será “con fuerza pero razonable”. Se espera que Trudeau ofrezca detalles sobre los pasos a seguir en una rueda de prensa programada para la tarde del sábado, hora local.
Funcionarios del gobierno canadiense, que prefirieron hablar de forma anónima debido a la naturaleza delicada de las negociaciones, han indicado que se está trabajando para formular una estrategia de respuesta. Aunque los detalles de la respuesta canadiense aún no se han revelado, se espera que el país busque medidas de compensación que puedan mitigar los efectos negativos de los aranceles en su economía.
Impacto de los aranceles al petróleo y gas
En el caso de los productos energéticos, el presidente Trump ha anunciado que los aranceles serán de solo 10% para el petróleo y gas importados. Aunque este porcentaje es más bajo que el del resto de productos, podría tener un impacto significativo en la economía canadiense, que depende en gran medida de sus exportaciones de petróleo hacia Estados Unidos.
A pesar de que el presidente no especificó exactamente qué países serán los más afectados por estos gravámenes, las políticas comerciales de Estados Unidos, al incluir el petróleo y gas dentro de sus objetivos, podrían afectar gravemente a las relaciones entre los países productores y sus principales socios comerciales.
Tensiones comerciales entre EE.UU., México y Canadá
La imposición de aranceles es parte de una serie de medidas más amplias que Donald Trump ha anunciado recientemente. En su discurso del viernes, el presidente estadounidense reiteró su intención de aplicar aranceles también a las importaciones de México y Canadá, lo que podría intensificar las tensiones comerciales en América del Norte.
Esta serie de aranceles forma parte de la estrategia de Trump para reducir el déficit comercial de Estados Unidos, particularmente con sus vecinos del norte y con China, que también está siendo objeto de nuevos gravámenes del 10%. Trump ha señalado que estas acciones son necesarias para proteger a la industria estadounidense y promover una mayor equidad en los acuerdos comerciales internacionales.

Reacciones internacionales y posibles consecuencias
La aplicación de aranceles, especialmente sobre productos clave como el petróleo y gas, podría tener repercusiones significativas no solo para Canadá, sino también para las relaciones comerciales de Estados Unidos con otros países. Las tarifas elevadas sobre las importaciones podrían hacer que los costos para los consumidores estadounidenses aumenten, especialmente en sectores como el energético.
Por otro lado, se espera que Canadá, junto con México, analice la situación en busca de formas de mitigar los efectos de estos nuevos gravámenes, buscando quizás la intervención de organismos internacionales o una negociación bilateral para reducir el impacto de las medidas.
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